Comerciantes de la localidad de Ramos Mejía, en el partido de La Matanza, piden a las autoridades que acepten protocolos sanitarios y les permitan abrir sus locales. “No damos más, necesitamos trabajar”.

En diálogo con El Nacional de Matanza, Gabriela Trenchi decía “yo tengo un local de indumentaria de mujer que es amplio y puedo atender perfectamente con una persona adentro. Hay que entender que nosotros tampoco queremos enfermarnos; podemos adaptarnos y diagramar protocolos, pero necesitamos trabajar”.

Los negocios de indumentaria, ropa y calzado, son los más perjudicados porque la venta online tiene un volumen muy bajo y además genera problemas de logística tanto para el vendedor como para el cliente en caso de tener que realizar algún cambio.

“Hay muchos comerciantes que cerraron y otros estamos intentando aguantar pero la situación no da para más” comentaba Gabriela, agregando “los que somos comerciantes chicos no tenemos otra entrada que no sea la del local, la subsistencia es terrible”.

“En mi caso yo no tengo empleados, pero el alquiler hay que pagarlo y los servicios y gastos fijos siguen llegando. Pedí uno de los créditos a tasa cero que anunció el gobierno pero no me lo dieron, por lo que la situación se hace muy difícil” finalizó Gabriela.

EL DIÁLOGO CON LAS AUTORIDADES

En este sentido Trenchi indicó que tienen prevista una reunión con autoridades municipales, pero aún no fue confirmada la fecha. También remarcó que están en contacto permanente con comerciantes de San Justo, donde la situación es muy similar, dado que son los dos grandes centros comerciales más perjudicados en La Matanza.