María Caccone, de 39 años, murió el jueves al recibir un balazo en San Justo cuando iba a depositar dinero a un banco.


El conductor del auto en el que viajaba María Caccone (39), asesinada por motochorros el jueves de la semana pasada en San Justo, quedó detenido sospechado de haber sido el «entregador». Se trata de Juan Marcelo Rearte (44), quien en principio había sido víctima también del hecho e incluso recibió uno de los disparos, que le rozó la cintura, pero ahora su situación cambió y es investigado como parte de la banda.

La detención de Rearte derivó en otros allanamientos en la zona de La Tablada. Allí los investigadores dieron con un Fiat Uno que aparece en videos e imágenes previos al ataque, en una actitud sospechosa detrás del Renault Logan que manejaba Rearte.

Ese vehículo estaba en poder de un menor de 16 años, familiar del detenido. Los policías encontraron, además, las llaves de ese auto en la casa de una mujer de 45 años, madre del menor. Ambos quedaron aprehendidos. En esa vivienda encontraron marihuana y tres celulares. Esos aparatos serán peritados en las próximas horas.

Mientras todo eso ocurría, era liberado Marcos Fabián González (35). El fiscal le imputó el delito de «hurto calamitoso» porque aparentemente aprovechó la ocasión para quedarse con unos 20 mil de los 120 mil que llevaba al banco María Caccone. El hombre, quien no posee antecedentes, le dijo a Fornaro que ese dinero había quedado en el lugar tras el robo y crimen de su compañera y que lo guardó para custodiarlo.

Además, explicó en su indagatoria que era el cumpleaños de su hijo y que necesitaba el dinero. Según los investigadores, el hombre recién entregó el dinero cuando estaba en la comisaría declarando como testigo del hecho, y lo tenía oculto en su calzoncillo.

Tras la indagatoria, González recuperó su libertad, a pesar de lo cual seguirá siendo investigado por el fiscal Fornaro.

Fuente Clarín