El Ejecutivo nacional analiza una reforma laboral que modificaría el cálculo de las indemnizaciones, con el fin de reducir los costos para las empresas y promover la contratación formal. La propuesta genera fuerte resistencia sindical.
El Gobierno encabezado por Javier Milei avanza en el análisis de una reforma laboral que incluye un cambio profundo en el sistema de indemnizaciones por despido sin causa. Según trascendió, el borrador de la iniciativa oficial establece que el pago por indemnización no podría superar el equivalente a diez sueldos del trabajador afectado.
El proyecto, diseñado por el ministro Federico Sturzenegger, busca actualizar el artículo 245 de la Ley de Contrato de Trabajo con el objetivo de reducir los costos laborales y ofrecer mayor previsibilidad a las empresas. En ese marco, el texto preliminar también propone excluir del cálculo los aguinaldos y los bonos anuales, lo que implica una reducción en la base de compensación para los empleados despedidos.
Desde el entorno oficial sostienen que la medida “podría incentivar la generación de empleo formal” al disminuir los riesgos económicos de contratar personal. Sin embargo, la Confederación General del Trabajo (CGT) manifestó su rechazo rotundo, advirtiendo que la propuesta implicaría una pérdida de derechos adquiridos y un retroceso en la protección laboral.
La iniciativa aún se encuentra en debate dentro del Consejo de Mayo, donde se analizan posibles modificaciones antes de su eventual envío al Congreso Nacional. Mientras tanto, el tema ya divide aguas entre el sector empresarial, que celebra el posible alivio de cargas, y los sindicatos, que advierten sobre una “nueva etapa de precarización laboral”.

