Durante su participación en el Congreso Productivo Bonaerense, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, criticó duramente al gobierno de Javier Milei, a quien responsabilizó por la pérdida de más de 200 mil puestos de trabajo formales desde el inicio de su mandato. Según el mandatario bonaerense, las políticas implementadas por la administración nacional están provocando una profunda crisis en el entramado productivo argentino.
Kicillof, que intervino de manera virtual en el evento, afirmó que las medidas impulsadas desde la Casa Rosada son “de carácter abiertamente antiindustrial” y apuntó que representan un verdadero “plan de exterminio” contra la industria local, la soberanía productiva y el desarrollo tecnológico que el país ha construido en las últimas décadas.
El gobernador subrayó las consecuencias directas de este rumbo económico: «Estamos viendo una caída significativa en los salarios, estancamiento en los haberes jubilatorios y un fuerte retroceso en el consumo interno. Todo esto deriva en el cierre de empresas y en el deterioro del empleo», advirtió. Además, reiteró que las decisiones del gobierno nacional están afectando gravemente a los sectores productivos, especialmente en la provincia de Buenos Aires.
En su mensaje, Kicillof trazó un contraste entre la gestión nacional y la política industrial que impulsa desde el territorio bonaerense. “Este congreso tiene como propósito reunir a los actores de la producción para poner en común las dificultades que están atravesando por el ajuste del Ejecutivo nacional. Desde la provincia vamos a seguir utilizando todas las herramientas a nuestro alcance para proteger el trabajo, la industria y el aparato productivo”, sostuvo.
La declaración del mandatario provincial se enmarca en un contexto de creciente preocupación por los indicadores económicos y laborales, y en medio de reclamos de distintos sectores industriales por la falta de apoyo por parte del Gobierno Nacional.
