La situación de los jubilados y pensionados en Argentina ha alcanzado niveles críticos, según advirtió el defensor de la tercera edad, Eugenio Semino. A través de declaraciones públicas realizadas este fin de semana, el especialista advirtió sobre el deterioro acelerado de las condiciones de vida de las personas mayores, y reclamó al Gobierno la implementación urgente de una emergencia alimentaria y sanitaria que brinde respuestas concretas.
Semino explicó que los haberes jubilatorios han sido gravemente erosionados por la inflación, sin un reajuste acorde que permita mantener el poder adquisitivo. “El ajuste de este mes fue del 1,5%, pero seis millones de jubilados y pensionados que perciben el bono extraordinario apenas recibieron un incremento real del 0,8%, lo cual está por debajo del índice inflacionario mensual”, sostuvo. Esa diferencia implica, en la práctica, apenas 4.000 pesos más en el bolsillo, una suma que –según remarcó– no cubre ni un café en muchos lugares del país.
El defensor también destacó que esta crisis ocurre en el período del año con mayor riesgo para la salud de las personas mayores. “Estamos atravesando los meses de más morbilidad: los adultos mayores se enferman más y no tienen los recursos para calefaccionarse. En geriatría se sabe que a menor temperatura, mayor es el riesgo de enfermedad. Y eso ya está sucediendo”, alertó.
Desde la asunción del actual presidente Javier Milei, los jubilados que cobran la mínima han perdido 13 puntos porcentuales frente a la inflación, de acuerdo con datos del INDEC. En lo que va del 2024, la inflación alcanzó el 118%, mientras que los haberes sólo crecieron un 105%.
Semino insistió en que la pérdida de poder adquisitivo no es nueva, sino que se arrastra desde hace más de una década. Frente a este panorama, llamó al Estado a intervenir con urgencia para garantizar derechos básicos. “No se trata únicamente de ingresos: hablamos de comida, medicamentos y techo. Es una cuestión de supervivencia. Los jubilados no solo están sufriendo, se están muriendo así. No podemos seguir dándoles la espalda”, concluyó con preocupación.