A pocas horas de haber participado de la multitudinaria marcha en apoyo a Cristina Fernández de Kirchner tras el fallo judicial que la condenó, el Secretario de Planificación Operativa de La Matanza, Miguel Saredi, dialogó con El Nacional de Matanza y dejó definiciones clave sobre el momento político que atraviesa el país y el rol de la dirigencia local en el contexto nacional.

Desde la redacción, conversamos con Saredi a su regreso de Plaza de Mayo, donde miles de personas se movilizaron para respaldar a la ex presidenta y denunciar lo que consideran una persecución judicial. En ese marco, el funcionario expresó con firmeza:

“No hay margen para discusiones menores, o internas, ante la crisis que tiene nuestra Patria y nuestro Pueblo. El acto de hoy lo demuestra”.

 Con la contundencia de quien lee el clima social y político con preocupación, Saredi remarcó que el país está atravesando un momento decisivo, que exige madurez y unidad por encima de cualquier disputa partidaria:

“Nuestro Intendente, y la mayor cantidad de los dirigentes, están de acuerdo en que quienes se quieran quedar con el chiquitaje de un concejal más o menos, o un diputado provincial —esa es la discusión en nuestra sección electoral— no están viendo el momento histórico que estamos viviendo”.

El Secretario destacó la necesidad de dejar de lado las especulaciones menores y mirar el escenario en su totalidad. En ese sentido, no dudó en comparar el liderazgo de Cristina Fernández con el de Luiz Inácio “Lula” da Silva en Brasil:

“Hay que tener la grandeza que tuvo Lula en Brasil, que siempre amplió su espacio, dio lugar a distintos sectores, defendió el federalismo y las autonomías locales, dejando a los Intendentes y dirigentes de cada Municipio y Provincia libertad y poder de decisión, siempre en el marco de un Proyecto Nacional”.

La referencia no es casual: mientras Lula volvió a la presidencia en su país con un mensaje de unidad y amplitud, en la Argentina sectores del oficialismo discuten candidaturas y estrategias en medio de un clima social convulsionado y una Justicia que es fuertemente cuestionada por amplios sectores del pueblo.

El testimonio de Miguel Saredi no sólo refleja el acompañamiento del oficialismo matancero a Cristina Fernández de Kirchner, sino también una advertencia a la dirigencia política sobre la necesidad de actuar con responsabilidad histórica. En La Matanza, como en tantos otros distritos del país, el llamado es claro: unidad para enfrentar una crisis que no admite mezquindades.