Los senadores nacionales verán nuevamente incrementadas sus remuneraciones luego de una actualización de sus dietas correspondiente a los meses de marzo, abril y mayo. Con este nuevo ajuste, el ingreso mensual de cada legislador superará los $9,5 millones, lo que ha generado cuestionamientos desde distintos sectores en medio de un contexto económico delicado.
La decisión fue formalizada el martes por los titulares de ambas cámaras del Congreso: Martín Menem, por la Cámara de Diputados, y Victoria Villarruel, por el Senado. La medida contempla un aumento acumulativo del 1,3% por cada uno de los tres meses mencionados, lo que redondea una suba considerable en las asignaciones que perciben los senadores.
Este nuevo incremento se suma al ya polémico aumento acordado en abril de 2024, cuando los legisladores de todos los bloques consensuaron una mejora en sus dietas sin tratamiento en el recinto ni debate público. Aquel episodio generó una fuerte reacción de la ciudadanía, que cuestionó la falta de transparencia y la desconexión de la clase política con la realidad social.
Frente a esta situación, gremios como ATE y UPCN, junto a representantes del personal legislativo, difundieron un comunicado en el que expresaron su preocupación por la falta de empatía institucional ante las necesidades sociales. “No podemos ser indiferentes a las urgencias económicas que atravesamos como sociedad”, afirmaron en el documento.
Mientras tanto, distintos sectores de la sociedad siguen reclamando mayor sensibilidad por parte de los funcionarios públicos ante el deterioro del poder adquisitivo que afecta a millones de argentinos.