Los sindicatos que representan a los docentes del país definirán entre este miércoles y jueves las acciones gremiales que podrían afectar el inicio del ciclo lectivo en varias provincias. La demanda central es la reapertura de la paritaria nacional y un aumento del salario mínimo, que permanece en $420.000 desde agosto del año pasado.
El gremio Ademys será el primero en deliberar, con una asamblea abierta programada para este miércoles a las 18 en Parque Rivadavia. La organización sindical rechazó el incremento del 5% propuesto por el Gobierno porteño para febrero, calificándolo de «insuficiente», y advirtió que no comenzará el ciclo lectivo en estas condiciones.
Por otro lado, la Unión Docentes Argentinos (UDA), la Asociación del Magisterio de Enseñanza Técnica (AMET) y la Confederación de Educadores Argentinos (CEA), agrupadas en la CGT, ofrecerán una conferencia de prensa el jueves a las 11 para anunciar los pasos a seguir. Según expresó Sergio Romero, secretario de Políticas Educativas de la CGT, el Ejecutivo nacional no ha convocado a negociaciones salariales y advirtió que la falta de diálogo podría derivar en un conflicto.
En paralelo, la Confederación de Trabajadores de la Educación (CTERA) llevará a cabo un plenario el jueves al mediodía para debatir estrategias. La secretaria general del sindicato, Sonia Alesso, afirmó que se ha otorgado un plazo considerable al Gobierno para reabrir la discusión salarial, pero hasta el momento no se ha recibido ninguna convocatoria formal.
Las medidas de fuerza que se definan podrían afectar el inicio de clases en 16 distritos que tienen previsto el comienzo del ciclo lectivo la próxima semana, entre ellos Ciudad de Buenos Aires, Córdoba, Mendoza, Santa Fe y Chubut, entre otros.