La llegada de Donald Trump a la Casa Blanca marcó un antes y un después en la política global, particularmente en lo que respecta al poder de Silicon Valley. Esta influencia se extendió más allá de las fronteras de Estados Unidos, encontrando resonancia en las políticas de Javier Milei en Argentina. El nexo entre ambos liderazgos refleja la aparición de una nueva clase de empresarios, más radicales en su enfoque, que buscan la disolución del Estado y el desafío de principios democráticos.
Trump, al asumir la presidencia en 2016, presentó una cara renovada de un conservadurismo tradicional que incorporaba un capitalismo más radical. Este modelo es impulsado por sectores empresariales que buscan una liberación completa de los controles institucionales, priorizando una libertad de negocios que transgrede los límites de la democracia. En Argentina, una ideología similar se observa en el ascenso de Milei, quien también busca reducir la intervención del Estado en la economía y promover un ajuste fiscal radical.
El financiamiento y apoyo de los «ceos tech» juegan un papel clave en este fenómeno. Peter Thiel, magnate tecnológico y aliado cercano de Trump, es un claro ejemplo de esta nueva burguesía que cuestiona la compatibilidad entre libertad y democracia. En un ensayo de 2009, Thiel expresó su visión de un mundo donde la libertad podría ser alcanzada solo a través de un esfuerzo individual, en contra de las estructuras democráticas establecidas.
Estas ideas encuentran eco en otros gigantes tecnológicos como Elon Musk, cuyo apoyo a Trump y a figuras políticas de extrema derecha como Viktor Orban y Alice Weidel ha sido público. Musk, al igual que Thiel, forma parte de una red global que favorece políticas libertarias y antiestatistas. En este contexto, la relación entre Milei y estos personajes se estrecha aún más, con Musk y Thiel interactuando directamente con el líder argentino. Miles de kilómetros de distancia no parecen frenar la creación de un «círculo rojo» global dispuesto a desafiar los principios democráticos en favor de un modelo económico radical.
Foto de portada: Musk (X, Tesla), Thiel (Paypal) y Galperín, de Mercado Libre, con visiones similares del mundo