La Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) llevó adelante una jornada de protestas a nivel nacional para rechazar el ajuste y las privatizaciones promovidas por el gobierno de Javier Milei. Las manifestaciones, que se realizaron en diversas provincias, tuvieron como principal eje el rechazo al recorte salarial y la creciente privatización de empresas públicas.
El secretario general de ATE, Rodolfo Aguiar, destacó que la medida de fuerza tuvo un gran impacto a nivel nacional, con una amplia participación de los trabajadores del sector público. Aseguró que, además de la falta de acuerdo en la paritaria estatal, los reclamos incluyen la reincorporación de los trabajadores despedidos desde el inicio del mandato de la actual administración.
Los manifestantes también se opusieron al plan de privatización de organismos estatales como Aerolíneas Argentinas y las compañías ferroviarias. En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, la protesta comenzó en la Legislatura, siguió en el Ministerio de Hacienda y culminó en la Plaza de Mayo frente al Ministerio de Economía.
La jornada se replicó en distintas provincias con paros, asambleas y radios abiertas, reflejando el creciente consenso en torno a la lucha contra las políticas de ajuste que afectan a los trabajadores estatales. Aguiar resaltó que este consenso se ha extendido más allá de los gremios y ha comenzado a calar en la sociedad en general debido al impacto negativo que las medidas gubernamentales han tenido en las condiciones de vida de la población.
El dirigente sindical afirmó que la falta de diálogo con el Gobierno y la negativa de atender los reclamos de los trabajadores hacen cada vez más necesaria una respuesta contundente. Además, advirtió sobre el daño que estas políticas de ajuste provocan en la democracia y el Estado, y señaló que el Gobierno está llevando adelante un proceso de privatización de bienes del Estado nacional, incluyendo más de 450 propiedades.