A los 14 años, a Celeste Iannelli le diagnosticaron leucemia. Ahora, con 19 , superó la enfermedad y hasta publicó un libro para ayudar a quienes atraviesan una situación similar. Además, en redes sociales cuenta sus vivencias.

A Celeste Iannelli le diagnosticaron leucemia cuando era una joven adolescente de 14 años que vivía en Ramos Mejía. Desde entonces, el hospital se transformó en su segunda casa y tuvo que atravesar un sinfín de internaciones. Hoy, a los 19, agradece ya estar recuperada. Sin embargo, lejos de olvidar su pasado, transformó la pesadilla que vivió durante años en un libro en el que cuenta sus vivencias y que se transformó en una referencia para otros jóvenes que sufren la misma enfermedad.

El nombre de la obra es «Diario de la servilleta. Una chica con leucemia… y una plaqueta que quiere contarlo todo». ¿El motivo? Durante años, dejó plasmados sus sentimientos y sus experiencias con tinta en varias servilletas. Luego, decidió recopilarlas y fue entonces como surgió este escrito.

«Estaba aburrida en el hospital, donde muchas cosas no tenés para hacer. Mi mamá me dijo: ‘tomá Celeste, escribí’. Y me da una servilleta del baño, por eso se llama Diario de la servilleta. Y bueno, ahí empecé a escribir lo que me pasaba. Siempre fui muy de los recuerdos. Era como que cuando pase todo esto, voy a agarrar la carpeta llena de servilletas, la voy a ver, y decir: ‘Cuánto pasó’. Pero no, se convirtió en un libro», recordó.

En total, fueron dos años de tratamiento de quimioterapia, una parte intravenosa y otra con pastillas. Aunque tuvo «momentos horribles» y reconoció que físicamente la pasó «muy mal», aseguró que no sufrió el proceso porque «pensaba nada más que en el tratamiento».

Una vez que todo terminó, agarró las servilletas, aunque sin saber con exactitud qué era lo que quería hacer. Primero, pensó en hacer una película animada. Finalmente, se inclinó por el libro, que ya lo presentó de manera presencial frente a un grupo de chicos en la provincia de Catamarca.

Su acompañamiento a los pacientes que sufren de leucemia no se limitó al libro. Cuando se recuperó, empezó a «darles consejos a otras personas sobre cómo tratar el duelo, cómo es vivir con corticoides, usando la comedia, el recurso del humor».

«Empecé a mostrarle a la gente cómo se me hinchó la cara, las ganas que tenía de comer, ventajas y desventajas de estar pelada», contó.

Comenzó a tener cada vez mayor alcance. Más y más pacientes se contactaban con ella. Actualmente, mantiene un perfil muy activo en sus redes sociales, donde comparte mensajes de apoyo, contesta preguntas y hasta cuenta con humor algunas de las adversidades que debió superar.

«Yo hablo todas las semanas con pacientes oncológicos y en el libro ellos pueden ver el día a día de alguien más. Hay pacientes que conocen a otros, pero hay pacientes que están solos en su habitación», expresó Celeste, que cuenta con casi 150.000 seguidores en Instagram y más de 450.000 en TikTok.

Además, suele dedicar varias de sus publicaciones a aquellos que están en «pleno tratamiento oncológico». En una de ellas, intentó eliminar la inseguridad y la angustia que representa para muchos perder el cabello: «El pelo CRECE. Una vez que el tratamiento termina, te va a crecer más lindo que antes, porque es totalmente nuevo, como el de los bebés».

«Sos igual de hermoso/a que antes. Quizás ahora no podes notarlo, porque es raro verte y ver al resto de las personas con pelo, pero lo que te hace ser vos no es tu pelo, es tu esencia, sos vos demostrándote que con o sin pelo sos la misma persona», agregó.

Fuente Zonales