El Gobierno anunció una amplia reforma educativa para 2026 que suprime la Educación Sexual Integral en todos los niveles, introduce cambios en Historia, Lengua y Matemática, y busca adaptar la enseñanza al mundo del siglo XXI.
El Ministerio de Capital Humano dio a conocer un proyecto que transformará profundamente el sistema educativo a partir del ciclo lectivo 2026. La iniciativa propone la eliminación de la Educación Sexual Integral (ESI) como materia transversal y la redefinición de varias asignaturas clave, entre ellas Historia Argentina, Lengua y Literatura, y Matemáticas.
Aunque la Ley 26.150 de ESI no será derogada formalmente, su implementación quedará sin efecto práctico debido a la exclusión de presupuesto en el Presupuesto 2026. En reemplazo, se incorporará en primaria una nueva materia denominada “Educación para la Salud”, mientras que en la secundaria los contenidos vinculados a la sexualidad se integrarán en la asignatura de Biología.
En el área de Historia, los nuevos lineamientos apuntan a fortalecer el conocimiento del contexto nacional de fines del siglo XIX y comienzos del XX. Además, se incorporarán módulos dedicados a los grandes conflictos internacionales, entre ellos la Segunda Guerra Mundial, la Shoá y la Guerra Fría. De manera especial, se incluirá el estudio de los atentados de 1992 y 1994 contra la Embajada de Israel y la AMIA, con el propósito de promover la memoria y la reflexión sobre el terrorismo y sus consecuencias en la sociedad argentina.
Las materias de Lengua, Literatura y Matemáticas también sufrirán transformaciones significativas. Se priorizará el desarrollo de competencias comunicativas, digitales y lógico-matemáticas adaptadas a las nuevas tecnologías. “Pondremos énfasis en la utilización de la inteligencia artificial y en cómo puede modificar el sistema laboral actual”, expresó un especialista que participa en la elaboración del plan.
El Gobierno sostiene que la reforma busca “modernizar” la enseñanza para adecuarla a los desafíos del presente, aunque la eliminación de la ESI ya ha generado cuestionamientos de distintos sectores educativos y sociales que advierten un retroceso en materia de derechos y formación integral.

