El avance del escándalo de las presuntas coimas vinculadas a la compra de medicamentos suma nuevos capítulos que generan tensión tanto en los tribunales como en la Casa Rosada. La droguería Suizo Argentina S.A. se negó a entregar a la Justicia la clave de acceso a los correos electrónicos de la compañía, lo que derivó en un procedimiento inusual: el responsable del área informática fue trasladado a una comisaría para dejar constancia de su negativa y advertirle sobre las consecuencias legales. Finalmente, los investigadores decidieron llevarse información extraída directamente del servidor central de la empresa.
Se trata de un hecho inédito en este tipo de investigaciones, ya que, en otros casos de corrupción, las compañías involucradas habían facilitado el acceso a sus correos corporativos. Incluso, en la causa de los Seguros, en la que se investiga al expresidente Alberto Fernández, no se registraron obstáculos de este tipo.
La decisión de Suizo Argentina dejó en una posición incómoda al presidente Javier Milei, que días antes había compartido un comunicado en el que la empresa aseguraba estar a plena disposición de la Justicia y los organismos de control. Sin embargo, el viernes a la medianoche, la actitud evasiva del personal y de sus abogados mostró lo contrario.
En paralelo, el abogado Martín Magram, representante de los dueños de la droguería, presentó un recurso solicitando la nulidad de la causa. Argumentó que los audios en los que el exdirector de la Agencia Nacional de Discapacidad (Andis), Diego Spagnuolo, habla de coimas habrían sido obtenidos de manera ilegal, apelando al derecho a la intimidad de los ciudadanos.
Lo cierto es que la investigación, encabezada por el juez Sebastián Casanello y el fiscal Franco Picardi, sigue en plena marcha. Aunque aún no se valoraron en profundidad las grabaciones de Spagnuolo, los investigadores cuentan con documentación incautada y una denuncia inicial del abogado Gregorio Dalbón que aporta detalles sobre los presuntos sobornos.
El caso también sumó un testimonio clave: Maive Carone Fernández, ex empleada del área de Accesibilidad de la Andis, aseguró que proveedores de todo el país denunciaban pagos atrasados que solo se liberaban si se abonaban coimas. Señaló además que esas prácticas estarían registradas en expedientes internos y en la Oficina Anticorrupción.
Mientras tanto, en la Casa Rosada crece la preocupación por la cercanía de Spagnuolo con el propio presidente, ya que su nombre todavía figura en un poder otorgado por Milei a abogados que lo representan en distintas causas. La incertidumbre política se mezcla con el avance judicial, en una trama que promete nuevos capítulos.