Docentes, no docentes y estudiantes de todo el país se preparan para una nueva jornada de lucha en defensa de la universidad pública. Esta semana, el Frente Sindical de Universidades Nacionales anunció un paro nacional de 48 horas para el jueves y viernes, en rechazo a las políticas de ajuste del gobierno de Javier Milei. Como parte de la medida de fuerza, se realizará una movilización con antorchas que partirá desde Plaza Houssay a las 17 horas del jueves, bajo el lema “Prendete a defender la universidad pública”, y culminará en el Palacio Pizzurno, sede de la Secretaría de Educación.
La protesta busca visibilizar la urgencia de aprobar la Ley de Financiamiento Universitario, un proyecto que contempla una serie de medidas clave para garantizar la continuidad del sistema universitario nacional. Entre los puntos centrales, la iniciativa propone paritarias trimestrales para el personal docente y no docente, con ajustes mensuales vinculados a la inflación; una actualización automática de los gastos operativos de las universidades según el Índice de Precios al Consumidor (IPC); la creación de un fondo de 10 mil millones de pesos destinado a carreras estratégicas; y un incremento progresivo del presupuesto universitario hasta alcanzar el 1,5% del PBI en 2031.
Desde la Federación Nacional de Docentes Universitarios (Conadu), sostienen que el proyecto “es fundamental para el sostenimiento y desarrollo del sistema universitario público argentino”. Por ello, convocan a toda la comunidad educativa y a la sociedad a sumarse al reclamo. Francisca Staiti, secretaria general de Conadu Histórica, llamó a participar de las movilizaciones previstas en todo el país y subrayó que la ley representa “salarios dignos, becas para estudiantes y el fortalecimiento de las universidades públicas”.
La medida se enmarca en un plan de lucha impulsado en conjunto con el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) y la Federación Universitaria Argentina (FUA). El presidente del CIN, Oscar Alpa, advirtió que “el futuro de la nación está en juego” si no se resuelve la crisis presupuestaria. Durante una conferencia de prensa junto a representantes sindicales y estudiantiles, Alpa alertó sobre el desfase entre los fondos recibidos y la inflación, la paralización de obras, la falta de respuesta en materia de becas y la grave situación del sistema científico, cuyo financiamiento fue prácticamente desmantelado.
La protesta del jueves promete ser masiva y refleja el malestar generalizado en las universidades frente a un escenario de creciente incertidumbre y falta de recursos para garantizar el normal funcionamiento de las instituciones educativas.