A partir del 1° de mayo, quienes se movilicen en colectivos y subtes en la Ciudad de Buenos Aires y la provincia verán reflejado un nuevo ajuste tarifario. El incremento será de un 5,7% para las 31 líneas urbanas de la Capital Federal y de un 5,9% para las 250 líneas bonaerenses, de acuerdo con las fórmulas de actualización vigentes que combinan el índice de inflación del mes anterior con un adicional del 2%.

En esta oportunidad, las 102 líneas de jurisdicción nacional no se verán afectadas por la suba y mantendrán sus valores actuales.

Los nuevos precios para los colectivos de CABA indican que el boleto mínimo (Sección 1) costará $451,98 para el pasaje general, mientras que los usuarios beneficiarios de la Tarifa Social Federal abonarán $202,67. Aquellos que utilicen una tarjeta SUBE sin registrar, deberán pagar $715,39. Para tramos más extensos, los valores llegarán hasta $581,64 en tarifa plena.

En la provincia de Buenos Aires, los boletos también experimentarán un alza. El mínimo pasará a ser de $450,68 en tarifa general, $202,46 para quienes cuenten con tarifa social, y $715,39 para aquellos con SUBE no nominalizada. En los trayectos más largos, el valor ascenderá hasta $617,74.

En el ámbito nacional, los valores no cambiarán. El boleto más barato seguirá en $371,13 y el más caro en $508,83 en tarifa plena.

Por otra parte, quienes utilicen el subterráneo porteño también deberán afrontar un nuevo aumento: el precio del boleto pasará de $869 a $919. En el caso de aquellos usuarios que no tengan la SUBE registrada, el valor se incrementará de $1381 a $1460. El Premetro, por su parte, aumentará de $304,15 a $321,65, mientras que sin registro de tarjeta SUBE el costo será de $511.

Estos ajustes impactan directamente en el bolsillo de miles de usuarios que dependen del transporte público para su vida cotidiana.