El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) difundió los datos de febrero sobre el desempeño de supermercados, mayoristas y centros comerciales, revelando que el consumo masivo sigue en terreno negativo, con cifras que reflejan estancamiento o leves mejorías, incluso en comparación con el año pasado, que ya había sido crítico.

En el caso de los supermercados, el volumen de ventas a precios constantes descendió un 0,3% respecto de enero. Si se compara con el mismo mes de 2024, se registró una suba del 1,5%, un número que refleja una mejora mínima frente a un período muy bajo de comparación.

Por otro lado, el panorama en los autoservicios mayoristas es aún más preocupante. Las ventas en este canal cayeron un 1% en relación a enero y se desplomaron un 9,1% en comparación con febrero del año pasado. Esta caída interanual representa una de las más significativas dentro del comercio minorista.

El único segmento que mostró señales claras de crecimiento fue el de los shoppings. Según el informe oficial, los centros comerciales experimentaron un incremento del 15% en sus ventas en relación al mismo mes del año anterior. A precios corrientes, el valor total de ventas alcanzó los $5.560 millones, lo que se traduce en un aumento del 80,7%.

Además, el INDEC detalló que los rubros con mayores incrementos de precios interanuales en supermercados fueron: indumentaria, calzado y textiles para el hogar (93,7%), productos electrónicos y para el hogar (82,5%), comidas listas para consumir (81%) y carnes (68,2%).

En cuanto a los medios de pago más utilizados en supermercados, las tarjetas de crédito lideraron el ranking, seguidas por las de débito, que representaron el 27,8% del total. El efectivo, en tanto, se ubicó en tercer lugar, con un 16,4% de participación en el total de las transacciones.