Un reciente estudio de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) reveló cambios sin precedentes en el ciclo global del agua, derivados principalmente de las actividades humanas. Tras analizar datos satelitales recopilados entre 2003 y 2020, los investigadores detectaron modificaciones significativas en el flujo y almacenamiento de agua en el planeta, lo que subraya la necesidad de replantear la gestión de los recursos hídricos a nivel global.
Entre las principales causas de estas alteraciones se encuentran la agricultura intensiva y la actividad industrial, que han modificado patrones naturales en el uso y almacenamiento del agua subterránea. Según Sujay Kumar, científico del Centro de Vuelo Espacial Goddard, estas intervenciones humanas han generado un impacto más profundo de lo que se estimaba, afectando incluso eventos climáticos extremos, como inundaciones más frecuentes, y provocando deshielos anticipados.
El estudio, publicado en la prestigiosa revista Proceedings of the National Academy of Sciences, advierte que los sistemas tradicionales de gestión del agua no están preparados para enfrentar este tipo de desafíos. Según Wanshu Nie, investigador principal, es esencial rediseñar estrategias que permitan abordar estas variaciones, especialmente en las regiones donde las transformaciones son más evidentes.
Utilizando tecnología satelital avanzada, como los programas Gravity Recovery and Climate Experiment y Global Precipitation Measurement, los científicos monitorearon el comportamiento del agua en diversas partes del mundo. Complementaron estos datos con información sobre la vegetación y la humedad del suelo, permitiendo a los expertos desarrollar modelos predictivos más precisos.
Augusto Getirana, coautor del estudio, enfatizó que estas herramientas serán clave para anticipar los efectos del cambio climático y planificar un manejo más sostenible del agua. En este contexto, los especialistas insisten en que es urgente tomar medidas que permitan mitigar los daños y garantizar la estabilidad de los ecosistemas, cuya capacidad de adaptación está en riesgo debido a estas alteraciones.