En una entrevista exclusiva con Pedro Artaza, por El Nacional de Matanza, el secretario de Planificación Operativa, Miguel Saredi, realizó fuertes declaraciones sobre los constantes ataques hacia el distrito, su dirigencia política y su esencia como territorio clave en la provincia de Buenos Aires.

Saredi señaló que estos ataques no se limitan al intendente Fernando Espinoza, a la vicegobernadora Verónica Magario o al peronismo local, sino que representan una ofensiva directa contra los valores que La Matanza encarna. «Es un lugar que abre los brazos a todos, donde las personas vienen a construir sus sueños, a conseguir un terreno, a formar una familia. Cuando atacan a La Matanza, están atacando ese valor de solidaridad y humanidad que algunos no comprenden», afirmó.

La Matanza: eje político y blanco de críticas

Durante la conversación, Saredi destacó la relevancia estratégica del distrito en el escenario político nacional, subrayando que «ganar en La Matanza significa tener grandes posibilidades de ganar una elección». Este peso electoral, según el funcionario, convierte al territorio en blanco de ataques sistemáticos, que incluyen la llegada de figuras de otros distritos y propuestas controversiales.

«Traen a cualquiera: ministros, deportistas, artistas. Ni siquiera disimulan que no son de acá. Ahora hasta proponen armar a la población civil, lo cual es una verdadera locura que aumentaría la violencia a niveles alarmantes», criticó.

 

Violencia y división: una estrategia peligrosa

Uno de los puntos más contundentes de la entrevista fue la denuncia de Saredi sobre el uso de la violencia como herramienta política. «Este gobierno y sus dirigentes fomentan síntomas de violencia: verbal, gestual y en redes sociales. Eso genera distanciamiento y odio, y ahora buscan llevarlo al plano físico con propuestas peligrosas como armar a la sociedad civil», expresó.

Saredi alertó sobre las consecuencias de una población armada, poniendo como ejemplo incidentes recientes de violencia cotidiana. «Imagínense al golfista de Pinamar armado o a los vecinos enfrentados por problemas triviales. Es una idea gravísima que va en contra de cualquier política seria», advirtió.

Resistencia y valores: el corazón de La Matanza

A pesar de los desafíos, el secretario subrayó la resiliencia de los habitantes de La Matanza. «Nuestra gente resiste frente a todo. Este es un pueblo maravilloso que, a pesar de los ataques y la adversidad, sigue en pie. Tenemos que valorar lo que somos y no dudar de nosotros mismos», concluyó.

La Matanza, como explicó Saredi, no solo representa un bastión político, sino también un símbolo de integración, solidaridad y esperanza en medio de los embates de la coyuntura política y social.