La secretaria de Energía de la Nación, Flavia Royón, anunció que los subsidios en los servicios de luz y gas se mantendrán para aquellos usuarios cuyos ingresos netos sean menores a 730.000 pesos.
La medida busca proteger a los sectores de bajos ingresos y entra en vigencia este martes tras el anuncio realizado en la radio Urbana Play.
Royón enfatizó que el Estado tiene como objetivo apoyar a la clase media y a los sectores de bajos ingresos, y solo aquellos que superen el umbral de ingresos mencionado deberán afrontar el costo pleno de los servicios.
Además, aseguró que la suba tarifaria será menor a la inflación y se aplicará hasta que haya una recomposición salarial para los sectores más vulnerables.
Por otro lado, la funcionaria observará que las boletas de los servicios para aquellos en la categoría de altos ingresos o que no hayan solicitado la tarifa subsidiada a partir de este mes, tendrán un aumento del 150 por ciento interanual. Por lo tanto, hizo detalladamente la importancia de revisar la factura y la recibió con los consumos anteriores.
Royón considera que la medida establece una distribución más justa de los subsidios y destaca que solo un pequeño porcentaje de las familias de ingresos medios supera el tope de consumo establecido. Asimismo, plantea la necesidad de implementar un sistema de incentivos económicos basado en el consumo energético en los hogares para fomentar la eficiencia energética.
Con esta decisión, el Gobierno busca garantizar el acceso a servicios básicos para aquellos con ingresos más bajos, mientras busca ajustar los costos para los sectores más acomodados, alineando así una política de equidad y sostenibilidad energética.