La Ong 18 de diciembre por el Migrante celebró nuevamente la Fiesta de las Alasitas 2023, en Villa Celina
«Acompañamos a la comunidad boliviana en su trabajo arduo en la preservación de sus tradiciones», expresaron
Cientos de vecinos y vecinas se acercaron a la celebración popular y festejaron su tradición tal como se hace en Bolivia cada 24 de enero. Se armó una feria con varios puestos de venta que fundamentalmente son animales de arado y amuletos. No faltó la comida típica andina.
Esta festividad se realiza en honor de la deidad quechua «Ekeko» que simboliza la abundancia, fecundidad y la alegría. A este ídolo se le rinde tributo con ofrendas de cigarrillos y figuras artesanales representando casas, autos, lugares de estudio, electrodomésticos o alimentos, con el fin de pedirle al Ekeko que los ayude a conseguir esos bienes que desean. También se le ofrecen figuras como toros (que simboliza el trabajo y la voluntad), elefantes (ahorro) o gallos o gallinas (poder conseguir novio/a).
La celebración ancestral proviene de 1781, cuando el entonces gobernador intendente de La Paz, José Sebastián de Segurola, ordeno celebrar una fiesta anual en honor al Ekeko en agradecimiento de que la ciudad fue salvada del cerco de Túpac Katari.
La palabra «alasita» proviene del aimara «comprame» y hace referencia a las figuras artesanales que todos los 24 de enero se venden en diferentes ferias, durante la fiesta, para poder ofrecer al dios Ekeko.
Amuletos, animales, dinero, prosperidad, trabajo, alegría; todo eso es La Alasita, una tradición que nutre la identidad boliviana.