Hoy 19 de septiembre se conmemora el Día del Instrumentador Quirúrgico en Argentina, fecha que recuerda el fallecimiento del Dr. Guillermo Bosch Arana, primer médico en incorporar esta figura profesional al plantel quirúrgico.

¿Cómo surgió?

Surge a partir de la Segunda Guerra Mundial, cuando los cirujanos de guerra fueron capaces de operar y salvar más vidas humanas de las que eran posibles hasta ese momento.

Estas actividades fueron respaldadas también por el advenimiento del uso de los antibióticos y esto sucede en el año 1928, cuando Alexander Fleming descubrió la penicilina.

Contemporáneo a ello, y ante la escasez de personal que asista en las cuestiones quirúrgicas, la armada comenzó a entrenar al cuerpo de hombres para que les ayudaran en las cirugías, bajo la supervisión directa del cirujano, para poder abastecer los hospitales de campaña de los teatros de operaciones del Pacífico Europa, ya que a las mujeres no les era permitido embarcarse en los buques hospitales y además eran solicitadas para la atención de los heridos en los hospitales de base y en los hogares, y es allí dónde nace una nueva profesión la del Instrumentador Quirúrgico.

En Argentina, en la década del 30, el Dr. Bosch Arana consideró imprescindible operar con Instrumentadoras Quirúrgicas en los grandes Centros Quirúrgicos, tal como lo escribió en el libro «Técnicas quirúrgicas sincronizadas» en el año 1937.

El objetivo del instrumentador quirúrgico es el de asistir, controlar, supervisar, y evaluar, el proceso de atención del paciente desde su ingreso al quirófano hasta su egreso a la sala de recuperación post-anestésica.

Dr. Bosch Arana.