En la última sesión del Concejo Deliberante de La Matanza la concejal Ana María Melho le hizo un sentido homenaje a Eva Perón.
“ Agradezco el honor de poder expresar la memoria de nuestra amada y eterna Evita. Ha sido trascendental en nuestra historia el renunciamiento de Eva Perón por muchos motivos significativos. 71 años atrás, el 22 de agosto de 1951, a las 17:30 hs, más de dos millones de compañeros y compañeras estaban presentes en la 9 de julio proclamando la fórmula de la Patria, integrada por Juan Domingo Perón y Eva Perón. Fue una impactante e histórica movilización popular, que está atesorada en la memoria viva del pueblo con mucho honor y amor a la patria. Este gran evento tiene un sentido simbólico, histórico, relevante para la sociedad y especialmente para las mujeres, porque en las elecciones de noviembre de 1951, votaron las mujeres, gracias a la ley 13.010 sancionada en el 1947, impulsada por nuestra amada Evita.Puedo afirmar que desde esos días las mujeres protagonizamos un incesante y creciente avance en términos de conquista de derechos y protagonismo político. Así mismo, en ese momento, fue muy cuestionado el renunciamiento a la candidatura, porque en ese contexto predominaban los estereotipos del patriarcado, porque ser mujer y ser vicepresidenta de la Nación era algo impensado, resistido por la oligarquía y ciertos sectores de la derecha de nuestro país. Es fundamental y un honor mencionar un fragmento de aquel inolvidable discurso ante la multitud convocada por la CGT, aquel llamado Cabildo Abierto.Evita decía: ” Ellos no perdonarán jamás al General Perón. A ellos les duele que Eva Perón, en lugar de dedicarse a fiestas oligarcas, haya dedicado las horas, las noches y los días, a mitigar dolores y restañar heridas. Todo lo que hice no lo hice nunca por ocupar una posición política en el país; es que estando el General Perón en el gobierno, el puesto de vicepresidenta no es más que un honor y yo ¿a qué aspiro?, al honor y el cariño de los humildes de mi patria».Días posteriores, el 31 de agosto de 1951, mediante LRA radio del estado buenos aires, justamente con la red de radio y difusión, se transmite la decisión trascendental por parte de Evita: ”Quiero que el pueblo argentino conozca por mi misma las razones de mi renuncia indeclinable. Declaro que esta decisión surge de lo más íntimo de mi conciencia y por eso es totalmente libre y tiene toda la fuerza de mi voluntad definitiva, no renuncio a la lucha ni al trabajo, renuncio a los honores. Por los trabajadores y por los descamisados seguiré luchando, como hasta hoy, con el corazón y el pensamiento puestos en el General, que con la grandeza extraordinaria de su alma, supo dejar mi decisión librada al arbitrio de mi propia conciencia y voluntad”.Y como tantos discursos, sus palabras trascienden en el tiempo, se instalan en el hoy, y como todo mandato para todas las mujeres militantes o no, y para todos aquellos que sientan y sienten el campo popular como propio, Evita nos dejó esa entrañable fuerza para la tarea de la militancia. Nos indicó que aún ni en los peores momentos se deben bajar los brazos. La lucha es continua y con un solo fin, el bienestar de todo nuestro pueblo. Eva y su presencia moral nos recuerda que son esos los principios básicos de la humanidad, como lo es ayudar al otro. Es el fundamento de nuestra militancia y es también lo que se vio reflejado en esta pandemia, donde todos nuestros militantes estuvieron ahí, al frente, poniendo su corazón y eso también transciende, porque ella nos dejó ese legado.
«Viva Perón, viva Evita y viva el pueblo de La Matanza», expresó.