Qué difícil es para nuestros políticos conjugar la palabra PLANIFICAR… pero eso sí, para la de vaguear son rápidos. Hasta te inventan neologismos.

La Provincia de Buenos Ayres tiene alrededor de 30% de tierra fiscal, 250 pueblos fantasmas y más de 300 con menos de mil habitantes, sin jóvenes. ¿Qué pasó? Los gobiernos se olvidaron de ellos, y las familias emigraron al Conurbano.

No hemos tenido una política de Poblamiento, tampoco voluntad de reorganizar territorialmente a la Provincia bonaerense, pasar de Partidos a Distritos con plena Autonomía municipal.

Así estamos, con una urbanopolis que amontona pueblos sobre pueblos. Con 24 municipios empobrecidos y hambreados que deciden la decadencia de los 111 restantes. Incluso los destinos de la Argentina, porque los votos presidenciales se consiguen ahí.

Nos dicen que Europa, en ingreso a su Edad Media, pasará hambre. Nosotros tenemos su comida. La producimos nosotros y se la vendemos o vendrán por ella. Y después no lloremos como mujer, lo que no supimos defender como hombres.

Podemos recuperar la Provincia, producir alimentos. Tenemos el INTA, SENASA, el INIDEP, el INTI, tecnología y buena calidad de científicos. Incluso trabajar con Brasil para construir plantas de agroquímicos, etc.

Planifiquemos estratégicamente. Los primeros años serán muy duros, de mucho sacrifico y esfuerzo. Lloraremos lágrimas de sangre, son 40 años que venimos haciendo las cosas mal. Pero, eso sí, si le ponemos voluntad y decisión, y con la guía de Dios y la orientación de un Proyecto Bonaerense, nuestros hijos nunca más pasarán hambre, buscarán futuro en tierras extrañas o deberán volcarse al narcotráfico.

Observen los medios, ¿qué están haciendo nuestros políticos? ¡Nada! Solo rosca para acumular poder político. Ni siquiera piensan en un Consejo Provincial para analizar la situación europea y potenciar nuestros recursos. Parece qué estamos dispuestos a seguirlos, pasando hambre.

Luis Gotte, La trinchera federal