Un 16 de febrero de 1835 muere el federal Facundo Quiroga.
Se cumplen 187 años del asesinato del caudillo riojano en Barranca Yaco. Su brazo ejecutor fueron los hermanos Reynafé; los autores intelectuales permanecen ocultos en los informes que se enviaron a Londres. Es tiempo de revolver viejos papeles, tarea para nuestros revisionistas.
El Tigre de los llanos, como le mencionaban, conocía muy bien el sentir de su pueblo, por eso toma las banderas de RELIGIÓN y FEDERACIÓN.
Poco se sabe, o se ha escrito, sobre la lealtad que se tenían con Dn. JUAN MANUEL DE ROSAS. Solo comparable con Rucci y Perón.
No fue un simple crimen político, el objetivo era dejar solo a Rosas, aislarlo, desmoralizarlo. Con Quiroga vivo, Urquiza no hubiera traicionado a la Confederación Argentina.
Quiroga, como Rucci, pagaron con sus vidas sus lealtades.
Luis Gotte La pequeña trinchera