Un policía de la Bonaerense de la Subcomisaría de Aldo Bonzi y un grupo de jóvenes fueron protagonistas de un hecho insólito que tuvo lugar en una plaza de dicha localidad, en el partido de La Matanza.

Cansada de los ruidos molestos, una vecina llamó al 911 para denunciar que el grupo de amigos que estaba apostados en el lugar no la dejaban dormir debido a que escuchaban la música a todo volumen y hablaban en un tono fuerte de voz.

Su queja se debía a que no era la primera que sucedía algo así sino que se venía repitiendo desde hacía días y siempre las juntadas eran por la noche, cuando ella se aprestaba a descansar. Incluso, le dijo a la operadora que los jóvenes se comportaban así porque también, supuestamente, consumían drogas.

Lo más insólito de todo fue que cuando arribó el patrullero: uno de los policías en lugar de cumplir con su deber se puso tomar con ellos del pico de una botella un líquido que la mujer asegura que era alcohol.

Toda la secuencia fue filmada por otro vecino con un celular y compartida en las redes sociales. La denunciante presume que se trataba de cerveza, aunque el efectivo se defendió entre sus compañeros y aseguró que era agua saborizada.

Tal como puede apreciarse en la filmación, luego de mantener un breve diálogo con los jóvenes, el policía tomó un trago, se subió al patrullero y se retiró del lugar.

La vecina indignada volvió a llamar al 911 y señaló: “Acá la policía está tomando con los chicos. Un policía paró y está tomando cerveza con ellos”.

Fuentes policiales informaron que se trata del oficial ayudante Héctor Emilio Barrionuevo, quien se desempeña en la seccional de Aldo Bonzi y fue pasado a disponibilidad una vez que trascendió lo sucedido. El área de Asuntos Internos del Ministerio de Seguridad bonaerense le inició un sumario y fue apartado de su cargo de la fuerza.

Por su parte, la mujer que hizo el llamado al 911 fue atacada en redes sociales por otros vecinos, quienes aseguraron que el uniformado estaba tomando jugo, al tiempo que la criticaron porque ella supuestamente llenó de grasa los bancos de la plaza para que nadie se siente, con el objetivo de evitar que se junten personas a la noche.