Rapipago, la red extrabancaria líder, presenta una identidad visual renovada que acompaña la evolución de su conjunto de productos con una visión 360°: sus 9.000 sucursales distribuidas en todo el país y los canales digitales, App y Web, desde donde se puede pagar, recargar, retirar efectivo y mucho más.
La marca se renovó después de 25 años en el mercado con el objetivo de adaptarse al mundo digital, pasando de ser un negocio monoproducto a un negocio multiproducto, y convirtiéndose en un centro integral de servicios con foco en el cliente, apoyándose en la tecnología para hacerle la vida más sencilla y acompañando todas sus necesidades. Esto a su vez se alinea con el camino de transformación cultural que viene transitando la empresa a nivel general basada en un modelo de triple impacto. La nueva imagen da sensación de modernización y flexibilización, con formas más amigables y naturales. Pensada con visión de futuro, con una sólida base en lo físico respaldando a la vez su abanico digital.
Su nueva paleta de colores, un azul, más cálido, con un toque magenta y la tipografía redondeada, de formas más blandas hablan de la simpleza en la expresión, trasmiten los valores de la marca y la muestran tal cual es. Acompañando la tipografía, se diseñó el nuevo isologotipo, cuyo valor está en su forma: un gesto, una sonrisa, una mueca.