El café «Edelweiss» ubicado en la Av de Mayo al 101 esquina Belgrano, de la localidad matancera de Ramos Mejía, cierra sus puertas.
Edgardo Troiano fue el fundador del mismo con tan sólo 23 años de edad,y despide su cafe con nostalgia: «El adiós a un sueño. Es el cierre de mi primera creación gastronómica, con más de 30 años de existencia».
El avance del coronavirus en La Matanza preocupa, en paralelo la crisis económica es notable y golpea a todos los vecinos.
Los últimos dueños redactaron una carta que se viralizó en las redes sociales: «Como tantos otros emprendimientos gastronómicos fue concebido por soñadores: hubo un primer soñador, su precursor, el Sr. Edgardo Troiano, que le dio vida allá por diciembre de 1986. En marzo de 1990, tomó la posta Don Paco, que lo soñó más grande, y entonces se amplió y mientras esto pasaba, Ramos Mejía se desarrollaba como un importante centro comercial y polo gastronómico de la zona oeste del gran Buenos Aires».
«Y seguía ahí, estoico, con su exquisito café, parado en la misma esquina, con la bandeja bajo el brazo, vistiendo chaleco y moño, como único y legítimo observador de todos estos grandes cambios que se avecinaban y amenazaban su propia existencia. Fue entonces cuando Sueños de Mayo, sociedad conformada por amantes del buen café, algunos de ellos clientes de la casa por más de 30 años, le dio continuidad a este proyecto y lo supo compartir con Néstor, Pablo, Mariela y Alejandro».
EFECTOS DE UNA PANDEMIA
«Pero esta feroz crisis, sin precedentes, nos fuerza a cerrar las puertas de esta casa, no sin antes decirles a todos ustedes, nuestros clientes, que fue un placer servirlos durante estos 6 años. Que deseamos sinceramente ser parte de su memoria emotiva cuando transiten por y que en un futuro no muy lejano cuando perciban el olorcito a café recién molido en cualquier esquina de acá o de allá, nos recuerden bien y nos añoren. Eso y sólo eso nos dirá, que sí, que hicimos las cosas bien, que no fue en vano».
UN GESTO PARA DESTACAR
«Sin perjuicio de nuestra intachable conducta como empleadores, la realidad es que nuestro equipo se queda sin su fuente de trabajo. Y deseamos aprovechar este comunicado también para pedirles a todos ustedes su amable colaboración para conseguirles un empleo a todos ellos. Ustedes y nosotros somos conocedores de su don de gente, predisposición y responsabilidad para el trabajo.”