El Movimiento Primero La Patria realizó una publicación recordando el Combate de San Lorenzo y La Batalla de Caseros, ambas llevadas a cabo un 3 de febrero pero con algunas décadas de diferencia.
3 de Febrero de 1813. Combate de San Lorenzo
En esta fecha se produjo el enfrentamiento armado -junto al convento de San Carlos Borromeo situado en la ciudad de San Lorenzo, al norte de la ciudad de Rosario (Santa Fe)- en el que las fuerzas independentistas rioplatenses sorprendieron y vencieron a las realistas de la Milicia urbana de Montevideo, quienes vía fluvial aprovisionaban la ciudad en el Sitio de Montevideo (1812-1814). Esta batalla fue la primera que libró el recientemente instituido Regimiento de Granaderos a caballo, y fue además el único combate librado en territorio argentino tanto por el Regimiento como su creador, el entonces coronel José de San Martín.
En el Convento de San Carlos Borromeo se conservan en una urna los restos mortales de los combatientes muertos. Detrás del edificio vive aún un viejo árbol bajo el cual San Martín redactó el parte de guerra referente al combate en cuestión. Actualmente, dicho árbol (un pino del Mediterráneo) está ya seco, debido a enfermedades y tormentas que lo afectaron durante las últimas décadas. Sin embargo, su tronco aún continúa en el lugar, como signo de la memoria de las victorias patrias que nunca desaparece, aunque pareciera que éstas últimas han caído en el olvido.
3 de Febrero de 1852. Batalla de Caseros
Conmemora el enfrentamiento armado ocurrido ese fatídico día de 1852, entre el Ejército de la Confederación Argentina, al mando de Juan Manuel de Rosas —gobernador de la provincia de Buenos Aires y Encargado de las Relaciones Exteriores de la Confederación Argentina—, y el denominado Ejército Grande, compuesto por fuerzas de Brasil, Uruguay, las provincias de Entre Ríos, Corrientes y Santa Fe y los unitarios exiliados, liderado por Justo José de Urquiza.
Este día marcó el comienzo de la derrota histórica del Federalismo rioplatense argentino, frente a la agresión imperialista internacional que se supo aprovechar de la venalidad y traición de quienes hasta ese momento habían formado parte de la Confederación Argentina. Una muestra más de que la Argentina sólo puede ser derrotada circunstancialmente por las deserciones vernáculas, nunca por la superioridad moral y espiritual.
Daniel Misino
Juan Carlos Vacarezza
José Arturo Quarracino
Secretario Político Secretario General Secretario de Formación y Doctrina