Falta de luces, paradas desoladas y robos que se multiplican. Ésta es la realidad en el Metrobus de La Matanza que fue inaugurado hace poco más de cuatro años y une González Catán y San Justo en una traza de 16 kilómetros sobre la Ruta Nacional 3.
Los vecinos comentar que ahora, cuando las luces empiezan a fallar, los pozos se multiplican, las paradas son vandalizadas y la inseguridad crece, nadie se hace cargo.
Cuando empieza a caer la noche se vuelve más peligroso para los que esperan el colectivo en las paradas, que no tienen suficiente iluminación. Los robos después de las 18 son moneda corriente no sólo en el Metrobus sino también en las paradas que se encuentran a partir del kilómetro 28 de la Ruta 3.
El mal estado de las calles y la falta de iluminación empeora en el tramo de Ruta 3 que continúa al Metrobus y por el que siguen algunos de los colectivos.
Gran parte de las paradas también se encuentran vandalizadas con carteles escritos en aerosol, tachos rotos y hasta incendiados.
Las líneas que circulan en la totalidad de los carriles exclusivos de este Metrobus son la 88, 96, 180, 205, 382, 620, 621, y las 218 y 622 de Almafuerte. Otras, entran y sale en distintas partes, como las líneas 55, 174, 236, 242, 306, 325, 378, 406, 624 y 630.