Luego de la muerte de Ángel Enrique Palacios, el pueblo de Dennehy ubicado al este de la provincia de Buenos Aires, en la localidad de 9 de Julio, paso a ser conocido como “El pueblo de los infieles”.
Todo se desató en marzo de 2005 cuando un hombre de 27 años fue hallado sin vida en las afueras de un almacén. Se encontraba con las manos en los bolsillos, postrado en el suelo, con un disparo en la frente y un orificio con salida a la nunca, le habían disparado de arriba hacia abajo.
Lo habían fusilado.En aquel entonces, el delegado municipal, Raúl Bracco, sostuvo que debido a la modalidad con la que lo asesinaron, el joven tuvo que haber presenciado de alguna situación no favorable y por ese motivo le quitaron la vida.
El único detenido por el crimen fue Clemente Villegas, a quien se le había atribuido el delito por haber tomado conocimiento de que su esposa, Lorena Valbuzzi, mantenía un romance con Palacios.Por disposición de la fiscalía, fue aprehendido y culpado como el único autor del hecho.
En virtud a su detención, Hugo Lopez Carribero desempeñó el cargo de abogado defensor de Villegas y fue quien además de ejercer como letrado, actuó como investigador privado en la causa a los efectos de poder demostrar la inocencia de su cliente.
La policía se encontraba desesperada por encontrar un culpable, y Villegas encajaba perfecto, ya que podría tener un móvil para cometer el asesinato.
En ese contexto, Lopez Carribero se vio obligado a exponer su integridad física para llegar al fondo de la cuestión, y es así como descubrió los secretos escondidos que abordaban al minúsculo pueblo, donde no solo las infidelidades se cometían a mansalva, sino que se organizaban fiestas con niñas menores de edad en las que participaban hombres y mujeres oriundos de la zona y también asistían poderosos empresarios y políticos de la localidad de 9 de Julio y sus alrededores.Los vecinos de Dennehy señalaban a Valbuzzi como una de las tantas integrantes que asistía a estas fiestas denominadas “Fiesta negra” y que además mantenía un romance con el enfermero de la salita de primeros auxilios del pueblo, quien organizaba las fiestas.
Valbuzzi confesó públicamente serle infiel a su marido, en reiteradas oportunidades y con más de un hombre, y aclaró que su esposo, era consciente de su libertad sexual y que eran felices y se amaban profundamente, y que haberlo engañado no modificaba sus sentimientos.
Luego de dos años, los jueces del Tribunal Oral Criminal N° 3 de Mercedes, resolvieron absolver a Villegas alegando la falta de pruebas en su contra. Y a juzgar por la reputación de Valbuzzi, cualquiera de los 42 hombres en estado sexual activo podrían enmarcar en calidad de sospechosos. El Tribunal definió a la localidad como “el pueblo de las francachelas sexuales”, lo que significa “reunión de varias personas para comer, beber y divertirse desordenadamente”.
Por lo tanto el móvil del crimen pasional ya no podía sostenerse.Hugo Lopez Carribero, escribió una novela policial titulada “Asesinato perfecto en el pueblo de los infieles”, basada en los hechos que acontecieron a este pueblo de no más de 200 habitantes, donde prevaleció una sentencia histórica y un crimen sin resolver.